Hay cosas que deberían ser como montar en bicicleta, para que no las olvidemos nunca. Solemos ser muy olvidadizos con los sacrificios
realizados a lo largo del tiempo y con las dificultades que hemos sufrido hasta
alcanzar nuestro actual nivel de bienestar. Nos asentamos muy fácilmente
en la comodidad y en la buena vida, como si siempre hubiéramos estado
instalados en esa posición, sin tener en cuenta el duro trabajo y las
penalidades que en el camino hemos soportado. Incluso, en muchas ocasiones,
negamos o no nos acordamos de una parte de nuestro pasado y de nuestras
vivencias, sin considerar que lo que hoy somos, fundamentalmente, se debe a lo
que fuimos ayer, y en cómo hemos afrontado los problemas que desde entonces nos
han ido surgiendo. Además, ese recuerdo es el que nos permite valorar más lo que
poseemos, contribuyendo a forjar de alguna manera, las aspiraciones que
hacen superarnos día a día.
Texto: Manolo Torres
Es cierto; nuestra memoria debería ser como el pedalear y mantener el equilibrio, sabiendo que pedaleando se hace camino, se saborea la vida y respiramos aire puro y cambiante. El equilibrio lo conservaremos si no olvidamos el Pasado, forjando un Futuro con las ruedas del Presente.
ResponderEliminarMe han encantado las Fotos de estos entrañables artilujios y las maravillosas Reflexiones.
Un abrazo, Manolo Torres.
Magnificos enfoques, con ediciones -como siempre- de lujo...
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